Conmemoración de los 25 Años de la Agencia .                                 Brasileño Argentina de control nuclear.

Por : Bernardo Goncalves Borrega.
         Periodista Acreditado.
         Corresponsal en casa de Gobierno .

El pasado 18 de julio la Argentina y el Brasil conmemoraron el 25º aniversario de la creación de la Agencia Brasileño Argentina de Contabilidad y Control de Materiales Nucleares (ABACC), que surge del Acuerdo para el Uso Exclusivamente Pacífico de la Energía Nuclear, suscripto en Guadalajara en 1991 por los presidentes Carlos Menem y Fernando Collor.

Esta fecha constituye un hito en la historia de la relación bilateral y regional, dado que profundizó el acercamiento estratégico argentino-brasileño, iniciado en el histórico encuentro de Foz de Iguazú entre Raúl Alfonsín y José Sarney en noviembre de 1985, y a su vez permitió consolidar la idea de una América Latina libre de armas nucleares.

Este organismo binacional con sede en Río de Janeiro, sólo comparable como sistema de verificación regional con EURATOM, está integrado por un equipo de inspectores calificados de ambas nacionalidades que vela por los usos exclusivamente pacíficos de la energía nuclear. 

A diferencia de otros mecanismos de aplicación de salvaguardias existentes, en la ABACC los inspectores argentinos y brasileños, en estrecha cooperación con el Internacional de Energía Atómica (OIEA), tienen un rol protagónico al realizar su trabajo en los dos países de manera conjunta.

En este sentido, quienes garantizan la paz nuclear en nuestros países son los principales interesados de ello: nosotros mismos.

Transcurrido un cuarto de siglo desde su creación, en un contexto en que la cuestión nuclear ocupa un lugar central en las relaciones internacionales, este modelo sui generis fruto de la creatividad y firme voluntad política de ambos países ha dado cabida a un interés creciente, sirviendo como fuente de inspiración para arreglos similares en otras regiones que, con sus particulares desafíos, aspiran a establecer zonas de paz.

Es por ello que en esta fecha ambos países celebramos los veinticinco años de una política de estado, y reafirmamos  una más el firme compromiso de la Argentina y el Brasil con los usos pacíficos de la energía atómica, y recordamos que juntos, hemos podido consensuar fórmulas originales que contribuyen a la paz y seguridad internacionales.

REFERENCIAS:

COMUNICADO CONJUNTO DE LOS PRESIDENTES MAURICIO MACRI Y MICHEL TEMER

El presidente Mauricio Macri y el vicepresidente en ejercicio del Brasil, Michel Temer, suscribieron hoy un comunicado conjunto por el cual celebran el 25° aniversario de la creación de la Agencia Brasileño-Argentina de Contabilidad y Control de Materiales Nucleares (ABACC).

Destacan “el derecho inalienable de los Estados a la tecnología nuclear para fines pacíficos, como también el carácter estratégico del diálogo, de la coordinación y de la confianza consolidada entre Argentina y Brasil en el campo nuclear”.

 Este es el texto:

Comunicado Conjunto en ocasión de la celebración de los 25 años de la Agencia Brasileño-Argentina de Contabilidad y Control de Materiales Nucleares (ABACC) – 18 de julio de 2016.

El Señor Presidente de la República Argentina, Mauricio Macri, y el Señor Vice-Presidente de la República Federativa del Brasil, en el ejercicio del cargo de Presidente de la República, Michel Temer:

1. Al reafirmar el derecho inalienable de los Estados a la tecnología nuclear para fines pacíficos, como también el carácter estratégico del diálogo, de la coordinación y de la confianza consolidada entre Argentina y Brasil en el campo nuclear, se congratulan por el vigésimo quinto aniversario de la Agencia Brasileño-Argentina de Contabilidad y Control de Materiales Nucleares (ABACC).

2. Destacan que la celebración del Acuerdo de Guadalajara, en 1991, por medio del cual se creó la ABACC, permitió superar desconocimientos y desconfianza mutuas y lanzar las bases de una relación transparente y cooperativa.

3. Reafirman que la ABACC es un mecanismo innovador de contabilidad y control de materiales nucleares, cuya eficacia se refleja en la estrecha colaboración con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), que propició, en los últimos 25 años, más de 2.500 inspecciones en ambos países.

4. Reconocen la importancia del Acuerdo Cuatripartito, firmado el 13 de diciembre de 1991, entre Argentina, Brasil, ABACC y el OIEA que, al regular la cooperación para la aplicación conjunta de salvaguardias nucleares, constituye un elemento esencial en el funcionamiento del sistema y ha contribuido a la no proliferación nuclear en la región.

5. Reafirman el compromiso con la construcción del Reactor Multipropósito Brasileño y del Reactor RA-10 de la Argentina, proyectos estratégicos conjuntos, que demuestran la confianza mutua en el campo nuclear y cuyo desarrollo permitirá abastecer el mercado regional del radioisótopo Molibdeno-99, esencial en la medicina nuclear para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades.

6. Manifiestan su determinación en reforzar y valorizar el diálogo político y técnico en el área nuclear, por medio de los mecanismos bilaterales existentes, en particular el Comité Permanente de Política Nuclear (CPPN) y la Comisión Binacional de Energía Nuclear (COBEN).

7. Subrayan el carácter estratégico de la cooperación bilateral en el campo nuclear para el desarrollo de los usos pacíficos de la energía nuclear, elemento esencial para alcanzar la autonomía tecnológica en ambos países.

8. Reafirman el compromiso de Argentina y Brasil con el desarme nuclear y la no proliferación e instan a los Estados poseedores de armas nucleares a eliminar completamente sus arsenales de manera transparente, verificable e irreversible.

19 de julio de 2016

ARTÍCULO DE LOS CANCILLERES SUSANA MALCORRA Y JOSÉ SERRA.

 Este 18 de julio celebramos los 25 años de la firma del Acuerdo de Guadalajara para el Uso Exclusivamente Pacífico de la Energía Nuclear entre Argentina y Brasil. Entre sus innovaciones, el Acuerdo prevé la creación de la Agencia Brasileño-Argentina de Contabilidad y Control de Materiales Nucleares (ABACC) para verificar el compromiso asumido por Argentina y Brasil con el fin de perseguir de manera inequívoca el uso exclusivamente pacífico de la energía nuclear, y para gestionar el recientemente creado Sistema Común de Contabilidad y Control de Materiales Nucleares.

Unos meses más tarde, en diciembre de 1991, los dos países suscribieron el Acuerdo Cuatripartito con la ABACC y el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). Fue la primera vez que la Argentina y Brasil negociaron como una sola delegación frente a un organismo internacional. En poco tiempo, se establecieron los marcos fundamentales de la relación bilateral estratégica entre Argentina y Brasil, que propició una atmósfera de paz, confianza mutua, y cooperación que prevalece entre los dos países.

Teniendo en cuenta la prioridad que atribuimos a la relación bilateral, lo que constituye uno de los principales ejes de nuestras respectivas acciones diplomáticas, es natural que actuemos de una manera integrada como socios en varias áreas. La receptividad con que este objetivo es abrazado por nuestras sociedades, en gran medida obedece a la decisión de estrechar nuestra cooperación en el campo nuclear.

En los años setenta, diferentes factores políticos e históricos perjudicaban la aproximación y dificultaban las relaciones entre nuestros países. Los desacuerdos acerca de la construcción de centrales de Itaipú y Corpus y las sospechas generadas por los respectivos programas nucleares nacionales amenazaban con el surgimiento de un espiral de inseguridad en la región.

Afortunadamente, el proceso de democratización en ambos países, a partir de los años ochenta, allanó el camino para una transformación radical en la forma en que Argentina y Brasil se perciben entre sí, dando lugar a una relación amplia caracterizada por la cooperación y la integración. Los presidentes Raúl Alfonsín y José Sarney jugaron un papel clave en este cambio. También fue importante la continuidad de este proceso por sus sucesores, cuyos esfuerzos, acompañados de un fuerte compromiso por parte de los sectores científicos y diplomáticos de ambos países, culminaron en la creación de la ABACC.

El proceso de cooperación bilateral permite que hoy nos dediquemos sin recelos al desarrollo de la energía nuclear con fines exclusivamente pacíficos, con miras a avances tecnológicos, económicos y sociales. Actualmente, Argentina y Brasil cooperan no sólo en la verificación recíproca de sus actividades nucleares, sino también en una serie de proyectos conjuntos que buscan concretar el sentido estratégico de nuestra relación. Tal es el caso de la construcción del Reactor Multipropósito Brasileño y el RA-10 de Argentina, dos proyectos emblemáticos conducidos conjuntamente por ambos países y capaces de abastecer todo el mercado regional del radioisótopo Molibdeno-99, clave en la industria medicinal. Debemos tener presente que la energía nuclear tiene un papel esencial que desempeñar tanto en el desarrollo sostenible como en la reducción de la dependencia de nuestras economías de los combustibles fósiles.

A través de la creación de la ABACC y el Sistema Común de Control de Materiales Nucleares, nuestros negociadores concibieron arreglos otrora impensables en un área sumamente sensible, mediante el cual las inspecciones de instalaciones nucleares argentinas son llevadas a cabo por los inspectores brasileños, y las inspecciones de las instalaciones nucleares brasileñas son conducidas por inspectores argentinos. Desde su creación a la fecha, la ABACC, en estrecha colaboración con el OIEA, ha conducido más de 2.500 inspecciones en ambos países, cuyo resultado se vierte en informes anuales publicados en su sitio web, y hoy participa con carácter de observador en las reuniones de la Junta de Gobernadores del OIEA.

La profunda confianza que esta dinámica requiere, y el alto grado de reciprocidad que la caracteriza, confirman no sólo la singularidad de la relación entre Argentina y Brasil, sino también su contribución a la región y el mundo, al tratarse de un acuerdo paradigmático en materia de seguridad y no proliferación. Esta rica experiencia bilateral hoy sirve de ejemplo como un posible modelo para superar impasses en otras regiones del mundo.

Nuestra experiencia con la ABACC demuestra que es posible crear nuevos niveles de confianza a través de la diplomacia y la creación de instituciones originales. En política, es preciso saber arriesgar en nombre de un bien mayor: la paz. Es en base a esa estrategia y esa vocación pacífica que Argentina y Brasil continuarán estrechando cada vez más sus lazos de amistad y cooperación, tanto en el ámbito nuclear como en todos aquellos que contribuyan al desarrollo sostenible de nuestros países y el bienestar de nuestras sociedades.

* Ministros de Relaciones Exteriores de la República Argentina y de la República Federativa de Brasil.