CIUDAD DE PANAMÁ.-

El viaje de Nicolás Maduro a Roma a ver al papa Francisco no tiene nada que ver con el diálogo. Tal afirmación fue emitida por Guillermo Cochez, ( foto) ex embajador de la Organización de Estados Americanos (OEA), quien cree que “es posible que Panamá haya hecho gestiones con El Vaticano para recibir al presidente venezolano”.

Pero el abogado va más allá y, como buen conocedor de la forma como se manejan las cosas en el seno del organismo regional, se atreve a suponer que la representación panameña en la OEA no suscribió el apoyo hecho por varios países hace algunos días “porque está guardándose para un posible arreglo trayéndose a Nicolás a Panamá”.

Al contactarlo para profundizar en sus comentarios hechos a través de su cuenta Twitter en torno al tema, Cochez reiteró que no ve ningún problema en que se le otorgue el asilo político, “si eso va a ayudar a la gobernabilidad en Venezuela… Así se evitaría muchas muertes”, señala.

TRISTES SIMILITUDES

El diplomático, un férreo opositor de la dictadura militar en Panamá, recordó que el país se hubiera podido ahorrar muchos muertos si se hubiese permitido que  el general Manuel Antonio Noriega se asilara en España.

En un ejercicio comparativo entre el ex “Hombre Fuerte de Panamá” y el sucesor de Chávez, Cochez señala: “¿Por qué Maduro se siente amarrado, se siente preso en su entorno, igual Noriega se sintió preso por su entorno? Si Maduro se va al exilio deja a mucha gente en el aire: militares, gente como Tarek El Aissami, Diosdado Cabello, y él se siente preso de esa gente”, dice y recuerda el triste final que tuvo el general panameño el 20 de diciembre de 1989. Con esa idea sobre la mesa, Willy Cochez concluye reflexionando sobre lo que se está jugando en Venezuela en estas horas tan complicadas.