¿COMO ERA LA NAVIDAD EN ESPAÑA, DURANTE EL SIGLO DE ORO ?

El carácter religioso era fundamental en una época en la que nacieron los villancicos y los belenes caseros.                                                                     

Publicado porFran Navarro .    

Historiador y experto en documentación.

En el siglo XVI la Navidad ya era una festividad tradicional en España, con los elementos y ceremonias que la componen totalmente fijadas como herencia medieval.

Las comidas en familia, los regalos y las fiestas propias del final de cada año tuvieron, sin embargo, importantes añadidos durante la época del Imperio español. 

A las mesas llegaron nuevos productos venidos de América, nacieron los villancicos, se creó la lotería y se montaron los primeros belenes como decoración ritual en recuerdo al hito religioso celebrado: el nacimiento de Jesucristo.                     

Quizás esa sea la mayor diferencia con la actualidad, la Navidad durante el Siglo de Oro en España tenía un profundo sentido religioso en todas sus formas.

Vista de Sevilla en el siglo XVI
Vista de Sevilla en el siglo XVI. Alonso Sánchez Coello / Wikimedia.

Los días previos.

Si hablamos de “preparar la Navidad”, hoy día la mayoría de nosotros pensaría en compras.

El consumo se ha impuesto por completo al carácter religioso de estas fiestas.

Hasta el concepto de “calendario de adviento” tiene otro significado en la actualidad. 

Durante los siglos de la Edad Moderna, el Adviento era esa fase de preparación en sentido religioso, un concepto que nos resulta hoy más fácil de asimilar comprándolo con la Cuaresma.

Los españoles de entonces llevaban a cabo ayunos, expiaciones y se intensificaban los rezos.

Francisco José Gómez Fernández es autor de Breve historia de la Navidad y señala la importancia religiosa que la población le daba a la fiesta.

“Llegado el día de Nochebuena, y tras la cena, el pueblo asistía masivamente a medianoche a la Misa del Gallo.

Nadie faltaba en España a tal celebración, pues se consideraba que junto a la fiesta del Corpus Christi y la Semana Santa, la Navidad era una de las tres grandes fiestas de la cristiandad y la citada misa su punto de partida”.Grabado de una comida de NavidadGrabado de una comida de Navidad. Duncan / iStock

Las primeras cenas de Nochebuena.

A pesar de la fe y el seguimiento de los rituales en los siglos XVI y XVII, el ayuno y la abstinencia del último día de Adviento se fue relajando.                                                           

Se suponía que esta mesura debía prolongarse hasta la medianoche entre el 24 y el 25 de diciembre, pero muchas familias (empezando por los nobles) fueron instaurando la costumbre de una cena copiosa antes de la Misa del Gallo como celebración anticipada de la Navidad. Junto a la comida del 25 de diciembre, eran (y siguen siendo) las dos más abundantes del año.

A productos tan típicos españoles como el insustituible jamón se le añadió el pavo, muy ligado hoy día a la Navidad, pero que llegó de América y, por tanto, su presencia en las mesas peninsulares solo fue posible a partir del siglo XVI.                                                                       

Ya se consumían mazapanes y otros dulces como el roscón de Reyes y el turrón, cuya elaboración por los artesanos de Jijona ya era famosa en el resto de España.

Figuras escenificando el nacimiento de JesúsFiguras escenificando el nacimiento de Jesús. Alexhstock / iStock

Villancicos y belenes.

Dos de los elementos más destacados de la tradición navideña tuvieron su origen en la Edad Moderna.

Aunque hay un debate histórico acerca de los primeros villancicos, muchos investigadores afirman que se configuraron definitivamente a finales del siglo XV. En sus inicios eran poemas recitados con música que tenían el amor y luego a la Navidad como temática.

Una de las teorías acerca del término “villancico” propone que viene de “villano”, es decir, que eran canciones populares, de aquellos que vivían en las villas.

“Debido al éxito de esta modalidad de canto los religiosos primero, y luego la Iglesia en general, se percataron del lugar que los villancicos podían ocupar, debidamente modificados, como difusores del mensaje evangélico”.

En cuanto a los belenes, era común que las iglesias representaran el nacimiento de Jesús, pero fue en el siglo XVI cuando se popularizaron y pasó a colocarse en todas las casas. Francisco José Gómez nos recuerda que “tal hecho no es de extrañar, pues el inicio de la Contrarreforma [con España a la cabeza], frente a las doctrinas de Lutero, que condenaban el uso de imágenes en la Iglesia, dio un fuerte impulso a estas escenificaciones en los países católicos”.

Teatro NavidadEl teatro era la gran pasión del público español en su tiempo de ocio. suteishi / iStock

El teatro .

Lo que conocemos como Siglo de Oro, coincidió con el auge político del Imperio español, pero lo que más brillaba en España por entonces era su nivel cultural en las artes y las letras.

Es por ello que uno de los eventos más importantes del momento era el teatro.

La temporada de Navidad hacía las delicias del público con obras de teatro de autores de la talla de Lope de Vega o Francisco de Quevedo.

Referencias:

  • Gómez Fernández, F. J. 2013. Breve historia de la Navidad. Nowtilus.
  • Núñez Roldán, F. 2004. La vida cotidiana en la Sevilla del Siglo de Oro. Sílex.